Ran Singh cayó como un ciprés en el jardín.(48)
Había un Raja de Ámbar y el otro de Jodhpur,
La mujer con el cuerpo radiante como perlas se adelantó,(49)
Cuando golpearon su escudo con gran fuerza,
Las chispas de fuego brillaron como gemas.(50)
Entonces el gobernante de Boondi, con gran vigor y fuerza, se adelantó,
Como un león procede a abalanzarse sobre el ciervo.(51)
Pero ella golpeó una flecha justo en sus ojos,
Y cayó como una rama del árbol.(52)
El cuarto gobernante, Jai Singh, saltó al campo de batalla.
Como internamente con rabia se comportaba como la montaña caucásica,(53)
Y este cuarto enfrentó el mismo final.
Después de Jai Singh, nadie se animó a presentarse.(54)
Luego vino un europeo y el de Pland (Polonia),
Y se abalanzaron como leones.(55)
El tercero, un inglés, irradiaba como el sol,
Y el cuarto, un negro, salió como un cocodrilo saliendo del agua.(56)
Golpeó a uno con una lanza, golpeó al otro,
Pisó al tercero y derribó al cuarto con el escudo.(57)
Los cuatro cayeron al suelo y no pudieron levantarse.
sus almas volaron hacia las alturas celestiales.(58)
Entonces nadie más se atrevió a acercarse,
Porque ninguno se atrevió a enfrentarse al que era tan valiente como el cocodrilo.(59)
Cuando el rey de la noche (luna) tomó el poder junto con su legión (estrellas),
Todas las tropas partieron hacia sus moradas.(60)
Llegó la noche y, para rescatar la luz, salió el sol,
Que ocupaba el asiento como señor del reino.(61)
Los guerreros de ambos bandos penetraron en el campo de batalla,
Y los escudos empezaron a golpear los escudos.(62)
Ambas partes entraron rugiendo como nubes,
Uno se estaba afligiendo y el otro parecía aniquilar.(63)
A causa de las flechas que llovieron de todos lados,
Las voces de los afligidos emanaban de todas partes,(64)
Como la acción predominaba a través de flechas, pistolas, espadas, hachas,
Lanzas, lanzas, flechas de acero y escudos.(65)
Al instante vino un gigante, oscuro como una sanguijuela,
que aullaba como un león y se excitaba como un elefante.(66)
Estaba lanzando las flechas como una tormenta,
Y su espada irradiaba como el relámpago en las nubes.(67)
Los ecos del tambor resonaron con sus sonidos,
Y la humanidad se vio obligada a afrontar la muerte.(68)
Cada vez que se disparaban las flechas,
Pasaron por miles de cofres valientes.(69)
Pero cuando se dispararon muchas flechas,
El gigante cayó como el desván de una mansión elevada.(70)
Otro gigante voló como una cometa para participar en la pelea,
Era tan grande como un león y tan rápido como un antílope.(71)
Recibió un fuerte impacto, lo hirieron con un misil y cayó al suelo.