La mente vaga como un abejorro en las cuatro direcciones. Pero al llegar al refugio del Verdadero Gurú y gracias a las bendiciones del Naam Simran, se funde en la paz y el consuelo del equilibrio.
Una vez que se recibe el polvo sagrado calmante, perfumado, delicado y muy hermoso parecido a un elixir de los pies del Verdadero Gurú, la mente no se desvía en ninguna dirección.
Debido a su asociación con los sagrados pies del Verdadero Gurú, al permanecer en un estado de voluntad divina y tranquilo estado de meditación y disfrutar siempre de un vislumbre de la luz refulgente, permanece absorto en la melodiosa y tranquila música celestial.
¡Créelo! Un Sikh obediente al Verdadero Gurú toma conciencia del Único Señor que está más allá de todos los límites. Y así alcanza el estado espiritual supremo. (222)