Aquellos que siguen las enseñanzas del Gurú con fe y sinceridad no tienen rencor. No tienen enemistad con nadie porque han realizado Su presencia en todos.
Quienes practican las enseñanzas del Gurú están libres de temperamento discriminatorio. Para ellos todos son iguales. El sentimiento de dualismo y la actitud de condenación de los demás desaparecen de su mente.
Aquellas personas llenas de escoria parecidas a cuervos que adoptan la sabiduría del Guru como verdad son capaces de deshacerse de toda la escoria y volverse limpias y piadosas. Un minúsculo conocimiento espiritual les ayudará a difundir la fragancia del Señor como el sándalo.
Aquellos que siguen las enseñanzas del Gurú destruyen todas sus dudas sobre los ritos y rituales. Se desapegan de los deseos mundanos y absorben el intelecto del Gurú en sus corazones. (26)