La vida humana tiene éxito si se pasa en el refugio del Verdadero Gurú recordando al Ser Supremo. La visión de los ojos tiene un propósito si se tiene el deseo de verlo.
Su poder auditivo es fructífero en quienes escuchan ese sonido creativo del Verdadero Gurú todo el tiempo. Esa lengua es bienaventurada si sigue pronunciando las virtudes del Señor.
Las manos son benditas si sirven al Verdadero Gurú y continúan orándole a Sus pies. Son benditos esos pies que siguen moviéndose circunvalando al Verdadero Gurú.
La unión con una congregación santa es bendita si genera un estado de equilibrio. La mente es bendecida sólo cuando absorbe las enseñanzas del Verdadero Gurú. (499)