Así como un cántaro de oro, si está abollado, se puede arreglar, mientras que un cántaro de barro nunca se puede restaurar a su forma original si se rompe.
Así como una tela sucia puede quedar limpia lavándola, mientras que una manta negra nunca puede volverse blanca hasta que se hace jirones.
Así como un palo de madera se puede enderezar cuando se calienta al fuego, la cola de un perro nunca se puede enderezar a pesar de numerosos esfuerzos.
Así es la naturaleza de los Sikhs obedientes orientados al Verdadero Gurú, que son tiernos y maleables como el agua y la cera. Por otro lado, el temperamento de la persona que ama el dinero es rígido y duro como la goma laca y la piedra y, por tanto, es destructivo. (390)