Siri Rag, Himnos del Reverendo Bhagat Beni yi. (Para ser cantados en el compás de pejre)
Un Dios Creador Universal, por la Gracia del Verdadero Guru.
Oh hombre, te fuiste a meter en el vientre, y parado de cabeza ahí meditabas.
Tu cuerpo estaba inerte y no tenías orgullo de ser hombre; estabas en el vacío, y el día era igual a la noche.
Recuerda esos días de tu gran aflicción, ahora que has extendido la red de tu mente a todas partes.
Saliendo del vientre, entraste al mundo para relacionarte con todos los hombres y te olvidaste del Señor de todos ellos. (1)
Te vas a arrepentir de seguro, oh tonto, ¿por qué entonces te metes ciegamente en el vicio y en la ilusión?
Recuerda al Señor, y si no, el ángel de la muerte te llevará de seguro. Oh hombre, ¿por qué estás así de desquiciado? (1-Pausa)
Como niño juegas y sigues a cada momento tu antojo por la lujuria y otros placeres.
Pruebas lo bueno y lo malo, lo dulce y lo agrio, el vino y las carnes, y atrapado en la tierra de los cinco demonios, aúllas de dolor.
Abandonaste la meditación, el servicio de Devoción, la continencia y las buenas acciones y te olvidaste completamente del Nombre del Señor.
La lujuria llegó a ti, tu razón se apagó, y al rato estabas abrazando a la mujer de otro. (2)
En el calor de tu juventud, arrebataste la belleza de mujeres que no te correspondían, y no distinguías entre el bien y el mal.
Intoxicado por la lujuria, la gran pasión del mortal, ni siquiera te enterabas de cuál era la virtud y cuál era el vicio.
Orgulloso de tus hijos y de tu riqueza, arrojaste al Señor fuera de tu corazón. Calculabas la parte de tus herencias y en la lujuria y en la gula malgastaste tu vida.
. Calculabas la parte de tus herencias y en la lujuria y en la gula malgastaste tu vida. (3)
Tu cabello se tornó blanco, más blanco que las flores de jazmín y tu voz tan débil, que parece que procede del séptimo mundo inferior.
Cuando de tus ojos salen lágrimas, cuando tu fuerza y tu intelecto te fallan, las pasiones se agitan en ti.
Así es que en el vicio, tu Alma se ha secado y la flor de loto del cuerpo se ha marchitado.
Rechazando la Palabra del Señor Inmortal en este mundo, oh tonto, te arrepientes (4)
Viendo a los niños y jóvenes, el amor nació en tu mente y pensaste con orgullo en ellos, pero no entiendes al Señor,
y aun cuando tus ojos ya no te funcionaban, querías tener más vida y más comodidades.
Cuando tu luz fue apagada y el pájaro de tu Alma voló, y nadie de los tuyos te quiso más ahí.
Dice Beni, escuchen, oh Devotos, ¿quién ha logrado la salvación después de la muerte? (5)
Siri Rag del Venerado Ravi Das.
Tú eres yo; y yo soy Tú, ¿En dónde está la diferencia?
¿De qué manera se distinguen el oro y el brazalete de oro? ¿O el agua y las olas? (1)
Si no tuviera faltas, oh Señor Infinito.
¿Cómo puedes ser Tú el Purificador de quienes las cometemos?(1-Pausa)
Te conocemos como el Maestro, como lo Íntimo de nuestro corazón.
Soy conocido como Tu Sirviente;(2)
de ser yo el Sirviente, Tú eres el Maestro.
Te llamo a Ti, oh Señor, pidiendo que me concedas esta Visión, que Ravi Das Te pueda reconocer en todo, y en todas partes. (3)